Recientemente, la concejala de Movilidad y Transporte Sostenible, Olatz Yarza, aseguró, en una visita a las cocheras de Dbus que, si los cálculos se cumplen, antes de que 2024 llegue a su fin se habrá rematado al 100% el proceso de electrificación de estas instalaciones.

Pero hay otro proceso que Dbus está desarrollando de forma independiente, que es la puesta en marcha del Bus Eléctrico Inteligente (BEI). Para avanzar con su implantación, la compañía de autobuses ha procedido a publicar el pliego de licitación para la contratación de la redacción del proyecto de construcción de la infraestructura de electrificación del parking exterior de cocheras.

Necesidades futuras

Esta intervención, recordaron desde Dbus, hará posible satisfacer las necesidades de carga de la futura línea BEI.

El presupuesto de licitación del proyecto, que tiene un plazo de ejecución y entrega de dos meses, es de 99.000 euros.

Aunque no hay todavía fechas concretas para que el BEI funcione en su plenitud, Dbus baraja que esta experiencia esté totalmente activa para 2026, aunque no descarta que algunas unidades estén operativas para 2025.

La totalidad de los autobuses que presten servicio en la línea BRI, 100% eléctricos, serán articulados y de 18 metros

Para que la línea 17 Gros-Amara-Ospitaleak pueda ser al 100% eléctrica es necesario disponer de una infraestructura de recarga adecuada para los nueve vehículos, todos ellos articulados y de 18 metros, que funcionarán en la citada línea.

El proyecto deberá contemplar la totalidad de la instalación eléctrica, la infraestructura de red de datos, la estructura metálica necesaria, el sistema carga de baterías y también la instalación contra incendios.

Además, la empresa adjudicataria del proyecto deberá preparar la memoria, planos, cálculos de detalles constructivos, mediciones y precios unitarios con el objeto de “garantizar el presupuesto del contrato y, en general, de cualquier documentación necesaria para la realización de las obras”. 

La instalación del BEI se colocará en el conocido como “aparcamiento nuevo”, pese a que ya tiene varios años de antigüedad, mientras que el proceso de electrificación de Cocheras se desarrollará en el aparcamiento superior.

Para el 17

La línea Gros-Amara-Miramon fue elegida en su momento para implementar el BEI por cumplir con ciertas características.

Se considera una línea “estratégica” para asegurar la intermodalidad entre Euskotren y Dbus, de la mano de la pasante del Topo en la parada de Anoeta.

Además, la línea 17 completa un recorrido de 15 kilómetros conectando el barrio de Gros con las estaciones de autobuses y Renfe, el complejo hospitalario y el parque tecnológico de Miramon.

El BEI será un transporte eléctrico sin emisiones que, además, propiciará a las personas usuarias una mejor experiencia de viaje, ya que también en el interior de los autobuses se notará el cambio, que redundará asimismo en los profesionales de la conducción. Serán éstas unas unidades “con diseño más vanguardista y confortable”, con suelos que imitarán a la madera y nuevos puntos de iluminación.

Con la puesta en marcha del BEI se calcula un ahorro anual de 239.528 litros de gasoil y 645 toneladas de CO2.

Las marquesinas de la línea 17 sufrirán también cambios, con un diseño más atractivo y una pantalla de información digital.