Los mejores regatistas de la península de vela 420 se verán las caras en la Copa de España que se celebrará en Donostia. La competición dará comienzo este jueves, y finalizará el domingo. Un total de 64 embarcaciones darán color al mar Cantábrico y el mismo número de participantes buscarán esquivar las boyas en el menor tiempo posible.

Tamaño de eslora

Las modalidades se diferencian por la medida de las embarcaciones. En este caso la Vela 420 se debe a que el barco debe medir 4 metros y 20 centímetros de eslora. Su hermano mayor, la modalidad 470, cuenta con una eslora más grande y entra dentro de las categorías que competirán en los JJOO de París en verano. Los barcos que se suelen emplear para este deporte tienen formas redondeadas y planas, lo que permite un mejor planeo y un mayor espectáculo.

La responsabilidad de organizar esta competición recae en el Club Náutico de San Sebastián. El propio equipo se encarga de obtener las flotas, de buscar alojamiento a regatistas y entrenadores, o de conseguir las concesiones del mar. Txema García es el responsable del Club Náutico de San Sebastián y director de la regata. El bilbaino afirma que los últimos 7-8 meses han sido de mucho trabajo y esfuerzo para sacar adelante esta edición de la Copa de España: “Hay un montón de gente involucrada para que esto salga bien, y sale adelante gracias al trabajo de muchos voluntarios”.

Txema García desatando cabos Cedida

Txema García lleva 20 años al mando del timón de la escuela de vela del club donostiarra, y opina que es un deporte que poco a poco está haciéndose un hueco Gipuzkoa, aunque le gustaría que tuviese más presencia: “No hay demasiada afición, me gustaría que hubiera más, pero poco a poco se está dando a conocer”.

Uno de esos deportistas que se codeará con los mejores regatistas del Estado es Josu Zabalza. El joven donostiarra de 15 años ha hecho del mar su pasión. Comenzó a desatar los primeros cabos a los 10 años y, aunque en otras competiciones defienda la flota del Club Náutico de San Sebastián, este fin de semana competirá bajo el escudo de la federación vasca en la categoría sub-17, junto a su compañero Iñigo.

Aprendizaje

Para Josu, la prueba es una oportunidad para “fijarse en lo que hacen los demás participantes”, para aprender y progresar en este deporte y, aunque la competitividad es muy alta, el hecho de salir con los mejores motiva al joven guipuzcoano: “Cuando ves que los rivales tienen un nivel alto y ves que algunos han estado en el Mundial de Brasil impone un poco, pero cuando sales al agua se te olvida todo”.

La Copa de España la compiten los mejores clasificados de las tablas autonómicas, aunque el Club Náutico de San Sebastián, por ser el organizador de la prueba, puede tener una representación más grande que el resto de los equipos algo que, en palabras de Txema García, hace que la “lista no sea tan cerrada”.

Un momento dulce

Este deporte está atravesando un momento dulce a nivel estatal, ya que en el último Campeonato del Mundo el combinado estatal consiguió clasificarse en el top 5 en tres ocasiones en las diferentes modalidades. Txema García afirma que hoy en día, “la selección estatal está por delante de Inglaterra, Italia o Grecia, que pueden ser las grandes favoritas”. Por lo tanto, las opciones de quedar en los puestos altos de la tabla en este certamen se antojan difíciles, pero Josu confía en que puedan salir destellos en momentos específicos: “Personalmente, creo que en una manga específica como excepción podríamos conseguir un buen puesto. No te puedo decir con certeza, porque depende de muchos factores”.

Imagen histórica del edificio del club Náutico de San Sebastián

Desde la orilla, Txema García asegura que lo más importante es que los jóvenes no se marquen objetivos inalcanzables y disfruten de la experiencia: “Hay alguna posibilidad de hacer algo bonito pero es importante no marcarte unos objetivos que no sean realistas, porque eso te lleva a la frustración”.

El viento y el mar son los principales jueces de este deporte, porque las tácticas de los regatistas dependen de cómo azoten las olas. Josu asegura que lo idóneo para este fin de semana sería “un viento de 10 nudos (18 km/h) o menos, y poco oleaje”, Txema, en cambio, opina que cualquier viento que venga desde el oeste o el nordeste “es ideal”, porque son vientos “más húmedos” pero que lo más importante para que se desarrolle la prueba es que “haya viento, da igual de dónde venga”. El vizcaino también indica que como la prueba transcurrirá fuera de la bahía de La Concha, el aire será “más limpio y constante”.

Actividades previas

Para calentar motores o, mejor dicho, izar las velas, el Club Náutico de San Sebastián ha organizado diversas actividades en la capital guipuzcoana, dentro del programa paralelo de la Copa de España.

Los que se han acercado al muelle del puerto de Donostia o al Aquarium han podido disfrutar de bautismos, charlas, proyecciones de películas o incluso talleres de vela, ya que desde el propio club organizador aseguran que la cita de este fin de semana es una oportunidad para que aquellas personas que desconocen este deporte se aficionen: “Desde el Náutico, el objetivo es que si hay donostiarras y guipuzcoanos que tengan curiosidad de acercarse a practicar la vela, nosotros les facilitaremos los recursos. El bautismo, por ejemplo, ha sido un exitazo, no por el número de participantes, ya que han sido unos 40-45, pero sí desde el punto de vista de la experiencia”, indica Txema García.

Niños y niñas partipando en los bautismos de este fin de semana Club Náutico de San Sebastián

El club también está muy comprometido con los valores sociales, la inclusión y la sostenibilidad. No concibe el hecho de disfrutar de un deporte sin que otra parte de la sociedad no lo pueda practicar. Por este motivo, el Náutico de San Sebastián trabaja con organizaciones como Aspace para que las personas con discapacidad intelectual puedan subirse a un barco sin ningún tipo de problema.

Compromiso por la inclusión y la sostenibilidad

También sienten un gran compromiso con el cuidado del mar y la sostenibilidad. Es ejemplo de ello la jornada Bihotz urdina que se celebró este sábado y que puso en valor la figura de los guardianes del mar que son todos aquellos que se encargan de que las aguas estén limpias: “Es un aliciente para el club trabajar con diferentes asociaciones y diferentes personas. Tenemos que intentar enseñar y promocionar esto a toda esta variada sociedad”, asegura orgulloso Txema García.

Las velas ya están izadas y los cabos desatados para que las embarcaciones zarpen este fin de semana. Tanto Txema García como Josu Zabalza nos han enseñado que, aunque la vela 420 no sea un deporte que ocupe grandes portadas en los periódicos, hay un gran sentimiento de compañerismo, aprendizaje y unos valores sociales que engrandecen la disciplina.